viernes, 9 de agosto de 2013

Las escuelas hechas museo



josé mª campos | soto 09/08/2013

El alcalde de Oseja fue el encargado de presentar el proyecto al numeroso público congregado ayer que disfrutó de las intalaciones.
El alcalde de Oseja
fue el encargado de presentar el proyecto
 al numeroso público congregado
 ayer que disfrutó de las instalaciones. s.b.v
El Ayuntamiento de Oseja de Sajambre presentó ayer la musealización de las obras de las escuelas de Soto de Sajambre. Carlos Granda concejal del ayuntamiento señala que se han invertido unos 700.000 euros en poner en valor este edificio. La última inversión ha sido de 40.000 euros de Parque nacionales para la rehabilitación de diverso material de la escuela. Además el grupo de acción local de Riaño dio 60.000 euros para arreglar el tejado. Se pretende hacer una concesión mediante concurso para quien desee la explotación de este centro. «El paso ahora es hacer una concesión a una empresa privada que se encargue de gestionar esta escuela además de la fábrica de la luz, el molino y otras obras de Félix de Martino como los lavaderos. Lo vemos con un recurso importante para el futuro del valle y la promoción turística del municipio», según Granda.
Hasta que llegue esta gestión privada las instalaciones durante este verano serán enseñadas por un empleado municipal y por personal voluntario de la asociación Félix de Martino. Se pretende aprobar una ordenanza que esté lista en diciembre para que la concesión se efectúe a primeros de 2014 según indicó el concejal Granda.
La escuela de Soto de Sajambre se construye en 1.906 a expensas de Félix de Martino, un indiano nombrado hijo predilecto del pueblo que hizo fortuna en México y dedicó parte de ella a procurar los mejores medios de educación a sus paisanos. La escuela fue edificada con un coste de 62.000 pesetas, financiadas íntegramente por el mecenas Félix de Martino, y fue construida con el apoyo de los vecinos, encargados del arrastre de piedras, y la colaboración de canteros asturianos.
Además de construir la escuela, la dotó de un material de última generación para su época, así como con la contratación de profesorado especializado que suplementaban las labores docentes de los del ministerio. Tras su muerte en 1924 y con la llegada de la Guerra Civil, la actividad de la escuela se ralentiza, cerrándose el gabinete de ciencias y manteniéndose en la normal de una escuela rural pública hasta su cierre, hacia 1985 debido a la falta de estudiantes. La Asociación Cultural Félix de Martino lleva desde 1994 velando por la conservación del material didáctico y pedagógico existente en la escuela de su pueblo, Soto de Sajambre, así como por el mantenimiento en las mejores condiciones del edificio, recurriendo a las ayudas disponibles para ello.

martes, 6 de agosto de 2013

Apertura de la Escula Museo Félix de Martino en Soto de Sajambre

    El próximo jueves día 8 de agosto se reabrirá al público la Escuela de Soto como Escuela Museo Félix de Martino. 
 

  
 
 
 
 
 
 
Después de las obras de acondicionamiento, restauración de materiales y musealización, la escuela volverá a recibir visitas para poder disfrutar de esta valiosa colección de materiales didácticos y que después de más de un siglo han llegado a nuestros días.
 
El acto de apertura tendrá lugar a las 19:00 h.

lunes, 5 de agosto de 2013

Una tradición hecha a mano





Más de 70 vecinos del valle procesionan por las calles del pueblo con la vestimenta propia de la zona, fechada a finales de 1800, y recuperada siglos después.
sara lópez | león 05/08/2013

Vecinos de las cinco localidades
que forman el valle posan con los trajes sajambriegos. dl
En los antiguos arcones y armarios del Valle de Sajambre aún permanecen recuerdos que evocan a la nostalgia, cajas repletas de fotografías que reflejan el día a día de otra época, y que son capaz de reunir a más de cincuenta vecinos en torno a una mesa para recuperar tradiciones ya perdidas. Cerca de 70 personas, procedentes de Pio, Oseja, Soto, Ribota y Vierdes procesionaron ayer por las calles de Pio de Sajambre con los trajes sajambriegos, una vestimenta propia de finales del siglo XIX, y que ha sido recuperada durante este último año por los vecinos del valle. «El objetivo de la iniciativa es recuperar parte de nuestro folclore popular, y conocer más allá las tradiciones de la zona y de nuestros antepasados», explicó Pedro Rodríguez, el vocal de la Asociación Cultural Pio de Sajambre, propulsora de la iniciativa, quien se mostró muy satisfecho con la acogida del acto. «Ha sido tan bueno el recibimiento de la gente, que hoy repetiremos en las fiestas de Soto, desfilando por la localidad con nuestros trajes», agregó.
Desde primera hora de la mañana, los vecinos lucieron sus trajes de época para acudir a la eucaristía que se celebró con motivo del patrón del pueblo, Santo Domingo, para posteriormente desfilar por las principales calles de la villa junto al Santo.
Respecto a la indumentaria propia de la época, para poder realizarla, los vecinos además de consultar fotografías han contado con la ayuda de la historiadora de Oseja, Elena Rodríguez, quien les ha documentado sobre la etnografía de la zona. «Una vez que nos informamos bien sobre cómo vestían nuestros antepasados, decidimos juntarnos los vecinos y comenzar a dar forma a esos trajes», explicó Rodríguez.
Unas reuniones, que además de servir para confeccionar el traje, han hecho de nexo de unión entre los habitantes de las cinco villas que conforman el valle, quienes durante los encuentros en torno a la máquina de coser, el metro y el hilo, han intercambiado impresiones y vivencias de la época. «Mientras elaborábamos los trajes, iban surgiendo anécdotas o recuerdos que muchos desconocíamos», indicaron desde la Asociación Cultural Pio de Sajambre.
Un año de trabajo
En cuanto al tiempo invertido para dar forma a los patrones iniciales, Rodríguez concretó que las mujeres de la zona se han reunido varias veces a la semana durante el último año, tanto en casas como en centros culturales. «Es un trabajo totalmente artesanal, hecho con mucho mimo», insistió el vocal de la asociación, quien calculó que cada vecino se habrá gastado «unos 300 euros entre las telas, y accesorios».
Respecto a las características de las vestimentas sajambriegas, Rodríguez concretó que son trajes con «ciertas similitudes a los trajes asturianos», compuestos por una salla interior, una falda tableada, corpiño, dengue o montera. «Los vecinos de Picos compartían ciertas similitudes culturales con Asturias, por lo que sus trajes eran muy parecidos, tanto el masculino como el femenino, teniendo como calzado unas madreñas», agregó Rodríguez.